I Domingo de Adviento - 2 de diciembre de 2012

 "Levantaos, alzad la cabeza; se acerca vuestra liberación"

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS 21, 25-38.34-36

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: Habrá signos en el sol y la luna y las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, enloquecidas por el estruendo del mar y del oleaje. Los hombres quedarán sin aliento por el miedo y la ansiedad, ante lo que se le viene encima al mundo, pues los astros temblarán. Entonces, verán al Hijo del Hombre venir en una nube, con gran poder y majestad. Cuando empiece a suceder esto, levantaos, alzad la cabeza; se acerca vuestra liberación. Palabra del Señor

Comentario Bíblico

Comenzamos el tiempo de ADVIENTO, en el que la Iglesia renueva sus motivos de esperanza y trata de recomponer los anhelos de una sociedad más justa y más humana para todos. Parece que este año, en este diciembre negro de 2012 estos anhelos y deseos cuadran perfectamente con el texto del Evangelio que abre este Adviento. 

Estamos en el capítulo 21 del Evangelio de Lucas, que es el protagonista de este ciclo litúrgico. Lucas tiene 24 capítulos, por lo que nos da una pista de que este fragmento es justo antes del comienzo de los últimos días de Jesús con sus discícipulos. Consciente de que hay algo en el ambiente que le hace ver que el conflicto con las autoridades va a terminar mal, Jesús, el Jesús que nos presenta Lucas, tan humano y cercano, les hace ver que van a llegar momentos oscuros, difíciles, en los que las gentes andarán enloquecidas y sin aliento, en los que la angustia y el miedo por lo desconocido y el dolor se vendrán encima a todo el mundo... ¿Os suena? ¿No parece que en este Adviento, estamos reviviendo dolorosamente esto? 

Sin embargo Jesús, sabe que la última palabra no la tiene ni la muerte, que el mal puede triunfar aparentemente, que el dolor puede ser duro y doloroso, pero por más que nos empeñemos, el bien siempre renace, siempre vuelve a buscar y a sobresalir por encima del bien, por eso ante estas situaciones, la actitud de los creyentes, de los discípulos, de los apóstoles no es la de echarnos en cara unos a otros lo que pasa, no es la de usar a "dios" para decir que disfruta castigándonos por nuestra mala conducta, sino la de LEVANTAR LA CABEZA, porque sabemos que se acerca nuestra liberación. 

Estamos necesitados de personas que sean capaces de mirar lo positivo y el Adviento, en medio de la crisis (no me preocupa demasiado la económica, que pasará, sino la de valores que es la que nos ha llevado a la económica), en medio de la dificultad, sean capaces de LEVANTAR la cabeza, propia y ajena y hacernos caminar hacia delante sin estar agobiados por lo de atrás y ni quedándonos presos e inmóviles en nuestro dolor. Es la única manera de salir adelante de todo esto. 

Dios ha decidido, desde su encarnación, enseñarnos a ser mejores seres humanos, haciéndose Él mismo ser humano, achuchable y pegable, fuerte y débil, luz y sombra... Eso celebramos y para eso nos prepara el Adviento. 

Este Adviento tiene que ayudarnos a Levantar la cabeza para ver el futuro que queremos construir y no avanzar como ovejas llevadas al matadero, sino dueños de nuestro destino, constructores de esperanza a base de tesón y entrega. ¿Qué Adviento quieres vivir? ¿Otra vez lo mismo? Haz de esta Navidad, LA NAVIDAD. 

Hace unos años, con un texto de los salesianos de León hice un vídeo poniendo imágenes y fragmentos de películas que puede ilustrar muy bien como aunque nosotros nos empeñemos en cargarnos todo, Dios siempre tiene un plan B para hacer resurgir la vida, espero que te guste y te sirva para reflexionar, se titula "El Antigénesis": 

Y recuerda que desde la Pascua de Jesús, todo final es principio... ¿Cómo vas a empezar?